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Conoce el Wabi Sabi Love

Natalie Matushenko
4 jun 2018
3 Min. de lectura

¿Estás luchando en alguna de tus relaciones principales, con tu pareja o matrimonio? ¿O has sido "herida" tantas veces que tienes miedo incluso de tener una relación seria?

He estado con mi esposo durante 25 años y definitivamente puedo confirmar que tener una relación íntima y cercana requiere MUCHO TRABAJO.

Hemos pasado por muchos altibajos a lo largo de los años. Desde enamorarnos locamente en lo que parecía una profunda conexión desde el alma, una etapa romántica de nuestra relación durante los primeros cinco años, hasta tener tres hijas, trastear de un país al otro, triunfos y luchas profesionales, pánicos relacionados con la salud, pérdidas de familiares queridos, un par de abortos naturales, muchas noches de insomnio, curación de toneladas de traumas del pasado que nos hicieron proyectar nuestros miedos sobre el otro... hemos pasado por mucho juntos.

Hay momentos en que me siento profundamente enamorada de él y me siento tan bendecida de haberlo conocido tan temprano en mi vida (tenía solo 22 años y él 26); y hay momentos en los que apenas puedo soportarlo y quiero huir a alguna parte. (Aunque para ser sincera, aprendí hace mucho tiempo que cuando quiero huir de la familia, es porque necesito establecer algunos límites y obtener algo de tiempo para mí).

Ninguno de los dos llegó a esta relación con "habilidades de relación" estelares y hemos tenido que trabajar arduamente para aprender estas habilidades a lo largo de los años, especialmente la comunicación; y tuvimos que trabajar muy duro para cultivar la paciencia.

Hemos hecho terapias de pareja, trabajo de curación y mucho trabajo de Coaching de Relaciones pero un concepto en particular, que se destaca por la gran ayuda que nos ha dado a lo largo de los años es Wabi Sabi Love.

¿Qué es Wabi Sabi Love?

Pueden recordar que hace un tiempo, entrevisté a una autora best-seller y experta en relaciones, Arielle Ford. Puedes ver su entrevista aquí en ingles. Ella desarrolló el concepto de Wabi Sabi Love basado en el antiguo concepto japonés de Wabi Sabi, que busca encontrar belleza y perfección en la imperfección.

Aplicado al amor y las relaciones, Wabi Sabi nos invita a buscar lo que es "correcto" en nuestro compañero y en nuestra relación, especialmente cuando las cosas nos vuelven locas.

Por ejemplo, cuando estoy enojada, necesito simplemente sacarlo. Quiero solo poder hablar, llorar y sentir empatía, comprensión y un gran abrazo.

Mi marido, por otro lado, tiende a entrar en el “modo solución” en el momento en que me ve alterada. A menudo interrumpe mi diatriba (es argentino y en su cultura, interrumpir significa que estás interesado y te importa lo que sucede) y comienza a hacer muchas preguntas "racionales", todas dirigidas a descifrar "los hechos de lo que está sucediendo" para que así pueda ayudar a resolver lo que sea que está pasando.

EXCEPTO QUE ESO NO ES LO QUE YO QUIERO.

Yo solo quiero ser escuchada y abrazada y sentida

¿Te identificas?

Solía ser un disparador para mí que el entrara en el “modo resolución de problemas”, pero desde que aprendí sobre Wabi Sabi Love, comencé a buscar la perfección en esta imperfección y esto es lo que me di cuenta:

Él realmente, realmente, me ama y se preocupa por mí y quiere ayudarme.

Él piensa que la mejor manera de ayudarme es "resolviendo" el problema, porque eso es lo que él querría si estuviera molesto.

Sí, le he dicho cien veces lo que quiero y necesito, pero él lo olvida. De hecho, cuando me ve alterada, quiere tanto ayudar, que entra en su modo natural de resolver problemas.

Cuando permití que esta perspectiva realmente se asimilara, mi corazón se ablandó y comencé a apreciar cuánto le importo y cuanto me ama realmente mi esposo.

Desde esta postura suavizada (en lugar del enojo de "aquí vamos, otra vez no me estas escuchando"), pude hablar con él sobre esto desde un lugar de amor. Entonces él pudo escucharme en lugar de ponerse a la defensiva y me confirmó que realmente quiere ayudar cuando me ve enojada y que a menudo no sabe qué hacer.

Y hablando se nos ocurrió una solución: cuando estoy molesta y solo necesito hablar, se lo recuerdo antes de comenzar a compartir y le pido que por favor solo escuche y se identifique. ¡Y lo hace! Funciona a las mil maravillas. Él está feliz de saber qué hacer y yo estoy feliz de que me escuche.

Tan simple y sin embargo tantos años de conflicto sobre esto.